La importancia del cálculo hidráulico convergido a bomba

Un análisis clave para un diseño hidráulico completo, eficiente y seguro

Introducción

En el diseño de sistemas de rociadores, realizar un cálculo hidráulico no es solo un requisito técnico: es una garantía de funcionamiento cuando más se necesita.
Aunque el foco suele estar en el área más desfavorable, la UNE-EN 12845 obliga también a analizar el comportamiento del sistema en su punto más favorable, donde el exceso de presión puede tener consecuencias tan relevantes como la falta de ella.

¿Qué dice la UNE-EN 12845?

La norma exige que, además del cálculo para el punto más crítico (donde se debe garantizar llegar con la presión mínima requerida), se analice también el comportamiento del sistema en su zona más cercana a la bomba, donde la presión disponible puede ser excesiva.

Este exceso de presión provoca que cada rociador descargue más caudal del que le corresponde, lo que:

• Incrementa el caudal total demandado por el sistema
• Aumenta el volumen necesario de almacenamiento
• Puede generar velocidades más altas en las tuberías
• Puede provocar ineficiencias o incumplimientos normativos

Este análisis es el cálculo convergido a bomba, y permite anticipar problemas ocultos en el diseño.

¿Por qué importa este cálculo?

Porque en sistemas con exceso de presión:

• Más presión = más caudal por rociador: cada rociador entrega más agua de la que debería.
• Velocidades excesivas: pueden no solamente superar las máximas establecidas por norma sino generar ruidos, golpes de ariete o desgaste prematuro.
• Más caudal = más volumen total: se incrementa la demanda de agua del sistema.
• Impacto en el diseño: el depósito puede ser insuficiente o sobredimensionado sin necesidad.

Ejemplo práctico comparativo

Como se aprecia, la presión duplicada provoca un aumento del 40% en el caudal total, y por tanto del volumen de depósito necesario.

¿Qué dicen otras normativas?

Si bien NFPA y FM no solicitan explícitamente el cálculo de la zona más favorable o “convergido a bomba”, deben tenerse en cuenta los siguientes puntos:

 🔹 NFPA 13

Exige comprobar que el sistema no supere los caudales nominales por exceso de presión. Se recomienda:

• Uso de válvulas reguladoras de presión.
• Diseño segmentado por zonas.
• Donde sea posible, utilizar rociadores de factores K menores (mientras esté permitido por la norma).

🔹 FM Global Data Sheet 2-0 / 3-26

Obliga a ajustar el diseño cuando se detectan presiones superiores a las recomendadas por el fabricante del rociador. El objetivo: evitar sobredemanda no justificada.

Ambas normativas coinciden con UNE-EN 12845 en lo esencial: la sobrepresión también es un riesgo si no se analiza correctamente.

¿Cómo lo abordamos en Prefire?

En Prefire realizamos siempre el doble análisis hidráulico completo en nuestros proyectos:

• Comprobación del área más desfavorable.
• Comprobación del área más favorable, donde la presión es más elevada (cálculo convergido a bomba).
• Validación de curvas reales de bomba.
• Propuestas de optimización (válvulas reductoras de presión, selección de los factores K más optimizados y adecuados, autonomía realista).

No solo buscamos cumplir normativa, sino garantizar un sistema seguro, equilibrado y eficiente.

Conclusión

Un sistema de rociadores no se dimensiona solo desde la urgencia del riesgo, sino desde la previsión y el control técnico.  Y ahí, el cálculo convergido a bomba es una pieza fundamental.
Es imprescindible para:

• Diseñar con criterios reales.
• Dimensionar adecuadamente el sistema (bomba, depósito y diámetros de tuberías).
• Evitar sobredimensionamientos.
• Garantizar la seguridad operativa de la instalación.

Porque anticipar lo que puede pasar cuando sobra presión es tan importante como asegurar que no falte.

En Prefire, calculamos con visión. Porque proteger mejor es entender mejor.