La última semana del pasado mes de febrero tuvo lugar en el recinto de IFEMA (Madrid) la feria bianual del sector de la seguridad y la protección contra incendio. A lo largo de un total de 4 pabellones, se dieron cita fabricantes, distribuidores y entidades corporativas de los sectores de la protección laboral, la seguridad anti intrusión y la protección contra incendio, que ocupaba uno de los 4 pabellones en uso.

Como ya venía sucediendo en los últimos dos o tres eventos, la presencia de expositores de nuestro sector dista mucho de ediciones anteriores, en parte debido a la gran crisis que el país en general ha sufrido estos último años, pero también en parte a la peculiar política de precios que Feria de Madrid exige a quien quiere exponer. Con estos precedentes, ha habido muchas compañías que han decidido no acudir como expositores, y otras que han optado por stands de reducido tamaño.

Pero independientemente del tamaño y la no presencia de alguno de los pesos pesados del sector, parece que si que se ha detectado algo de optimismo en los allí presentes. Optimismo reflejado en la cantidad de visitantes, optimismo reflejado en la presencia de nuevas empresas que intentan aportar savia nueva al sector, pero sobretodo optimismo en la gente, en las tertulias, charlas, encuentros que todos y cada uno de nosotros hemos mantenido con colegas de este oficio tan peculiar. Gente que marchó y que ha vuelto; gente que se ha jubilado, pero «sigue estando» (nunca se irán, seguro); obviamente, gente que ha cambiado de camiseta (si pasa en el fútbol, como no va a pasar en este negocio…); todos ellos con ganas, con optimismo y con algo de luz en el final del túnel.

Los que por suerte hemos vivido estos últimos «Sicures»  y seguimos estando al pie del cañón, lo celebramos. La crisis nos ha hecho más fuertes, y a buen seguro estos próximos años nos fortaleceremos más. Si somos capaces de aprovechar este lento pero creciente despertar de la economía nacional, el futuro se presenta con renovados ánimos. Ahora solo faltan dos cosas: no hacernos daño entre nosotros, y que las administraciones ayuden. Podrían empezar por darnos algo que hace una década que esperamos y merecemos sobradamente: el nuevo RIPCI, este regalo que cada año pones en la carta a los Reyes Magos pero parece que se agota en sus almacenes justo el día antes que vengan a tu casa.

Por último, un apunte institucional, pero que representa sin duda una prueba de ese optimismo que he citado. Como cada SICUR, se ha celebrado la Asamblea de miembros calificados por CEPREVEN, en la que se expusieron las actividades realizadas  en el ámbito de la calificación de empresas desde la anterior asamblea y las líneas de trabajo iniciadas para nuevas áreas de calificación, así como la memoria de actividad. Mención especial para este punto, pues por primera vez se nombró el Comité de la nueva Calificación de instaladores de sistemas de control de humos, con la presencia de PREFIRE  dentro de la terna de empresas elegidas.

Positivamente, la asistencia superó con creces la de las últimas asambleas celebradas, fiel reflejo de la buena salud que en estos momentos goza este segmento de mercado, concebido para posicionar a las empresas que, como PREFIRE, apuestan por un mercado de calidad y no de cantidad.

También se procedió a la elección de los representantes de las empresas calificadas en el Comité de Calificación para los dos próximos años. En este sentido, contemplamos con sorpresa un cambio radical en la terna de representantes por la parte de los instaladores. Honestamente hablando, quisiera felicitar a los miembros salientes, pues su salida no obedece en ningún caso a haber hecho mal las cosas;  más bien todo lo contrario, han hecho una labor encomiable, no remunerada y dura cuando tu día a día te tiene absorbido la mayor parte de tu tiempo. Felicitar también , por supuesto, a los tres miembros nuevos en el Comité. Ellos son los encargados de tomar el relevo y proseguir el trabajo efectuado por sus/nuestros colegas.

En fin, otro SICUR más, todos dos años más viejos, pero a buen seguro algo más optimistas ante el futuro próximo. Mucha suerte a todos, que siempre es buena compañera de viaje, y hasta el próximo, en 2018 si ningún iluminado lo impide.